En 2008, en el barrio de Delicias, justo al pasar el túnel de Labradores, abrió sus puertas El Duomo con una idea clara: ser un lugar donde el buen comer y el buen ambiente fueran inseparables. Desde entonces, cada café, cada tapa y cada encuentro han ido creando una comunidad de clientes que ya son parte de nuestra familia.
Hoy, más de 15 años después, seguimos sirviendo con la misma pasión, orgullosos de nuestras más de 250 reseñas positivas y de ser un punto de encuentro imprescindible en Valladolid.
Disfruta sin reservas de cócteles de autor, tapas caseras y la terraza más animada de Bar Duomo.